Este es el relato que presenté al Certamen de Literatura exprés 2016. No resultó seleccionado así que hoy lo subo al blog tal cual lo presenté, copiado del original que me devolvió anoche la organización. En cualquier caso la experiencia fue realmente bonita:cuarenta y seis escritores de entre diecinueve y setenta y un años, concentrados en la Casa de José Zorrilla desde las nueve y media de la noche y hasta la hora tope de la una de la mañana, armados tan solo con un bolígrafo. La organización extrajo ante todos los presentes un tema al azar que debía inspirar el relato. Cinco folios en blanco, con el sello de la organización para evitar tretas, aunque aquí se suele competir en buena lid. Un espacio de relax donde poder tomar un café, un te, agua o zumos. Este año incluso ha habido una zona para fumadores por si en la vorágine creativa te entraban unas ganas locas de fumar. Muy muy buen ambiente. El tema: "El rufián viudo" (título de una obra de Cervantes) Espero que os guste.
Para ser completamente sincero, he de reconocer que desde hacía ya algunos años, la deseaba la más atroz de las muertes. Cuando la conocí no me cayó nada mal, es mas, incluso llegó a gustarme y todo. Siempre fue una mujer atractiva, aunque su atractivo era únicamente físico. Ella no era en absoluta inteligente ni culta, al contrario, él era un tipo intelectualmente muy superior a la media y esto no lo digo porque él fuese mi mejor amigo, qué va. Marcos terminó la carrera con una media de matrícula de honor pero sin ser el típico empollón o la clásica rata de biblioteca. De hecho Marcos debió hacer un máster en Mus y Julepe en la cafetería de la Facultad. Iba completamente sobrado. Podía haber estudiado cualquier carrera pero algo que desconozco, le llevó a estudiar Ciencias Políticas. Yo que soy algo más normalito, estudié Derecho. Marcos siempre evitó definir su ideología o posicionarse con ningún partido hasta haber terminado la carrera y ya con el título en la mano, se afilió a un partido nacionalista de extrema derecha. Todos los amigos nos quedamos muy sorprendidos, incluso Cesar, que era el más "perroflauta" de la pandilla, le dejó de hablar. Yo entre bromas, le agradecí a Marcos que se convirtiese en mi primer cliente en potencia. No tardó en comenzar a hacer de las suyas. En menos de un año consiguió arrebatarle la presidencia del partido al anciano Guardia Civil golpista que ostentaba el cargo y su nombre apareció en todos los diarios, revistas y en general, en todos los medios de comunicación Y por nada bueno. Bien es cierto que Marcos siempre ha tenido mucho carisma y era capaz de venderle arena a un beduino. En el tablero de la política de este país, tan dada a los escándalos y la corrupción, supo jugar magistralmente sus piezas, sacrificando maquiavélicamente cuantos caballos y peones hicieron falta. Convenció a los nostálgicos de regímenes pasados, de que España necesitaba mano dura y un líder a la altura de las circunstancias y, de que él, era el nuevo Caudillo por la Gracia de Dios. Cerró las fronteras a todos aquellos que llegaban escapando de la miseria o de la guerra en sus países. Torpedeó habilmente el empleo y la inserción social de los inmigrantes y en menos de lo que canta un gallo millones de compatriotas comenzaron a arrepentirse de que las últimas elecciones, hubieran aupado a la presidencia a semejante energúmeno. Entonces anunció su inminente enlace matrimonial con la hija del líder de la oposición. Su proceder recordaba al de algunos monarcas de la antigÜedad, aunque aquellos fanáticos de la serie "Juego de tronos" trataron de advertir de las consecuencias de haber dejado el trono a tal vendedor de humo y de "pan y circo". La "marca España" se hizo cada vez más presente al favorecer con dinero y medios ilimitados a los deportistas de élite, directores de cine, escritores y todo tipo de artistas en general. A sus esponsales, por la Iglesia como no podía ser de otra forma, acudieron los mandatarios de medio mundo. Las arcas del estado financiaron la asistencia gratuita a los campos de fútbol durante toda la temporada liguera. El Ministerio de Cultura contrató una gira maratoniana del "Circo del sol" y las entradas para sus espectáculos se regalaban previa presentación de la tarjeta de la Seguridad Social. "Marcos del pueblo" como le gustaba ser llamado por todos, prohibió las franquicias de comida rápida y en su lugar, inundó las ciudades de locales donde se despachaban por cantidades ridículas, bocadillos de tortilla de patatas y raciones de jamón serrano. Cuando desde Bruselas trataron de advertir de la futura debacle de la economía nacional, directamente ordenó cerrar el paso del Estrecho y comenzó a a cobrar aranceles y tasas a todos los mercantes y barcos de pasajeros. Un día su "queridísima" esposa hizo unas declaraciones algo ambiguas sobre su marido a la B.B.C. Al cabo de una semana sufrió un accidente esquiando en Suiza y la pobre se rompió el cuello, muriendo en el acto. No dudé en absoluto que aquella desgracia fue en realidad un trabajito de los servicios secretos. Mucha gente desaparecía de sus localidades y con el tiempo iban engrosando la cada vez más abultada lista de fallecidos en accidentes de tráfico, catástrofes naturales y por último ya, directamente aparecían degollados en los descampados y polígonos industriales de las poblaciones. Así apareció el bueno de Cesar, con el cuello cortado de lado a lado y la lengua asomando por la abertura. Pobre gilipollas idealista. Trató de hacer valer su vieja amistad con Él ante los sicarios que se ocuparon del encargo. Yo fui al funeral de su mujer, lo abracé y le dí mi más sentido pésame. Traté de consolarlo en su dolor. Mi amigo es un rufián, pero un rufián viudo y eso no deja de apenar a la gente de buen corazón. Ahora ya no puedo hacer nada. Solo me queda rezar mi última oración y maldecir por siempre su nombre y mi falta de valor para haberle parado los pies cuando pude. Arrodillado junto a la tapia de la estación, escucho como un sub oficial de las fuerzas de asalto amartilla su automática. Apoyando el cañón de su nueve milímetros sobre mi nuca, silba una cancioncilla de moda. Al menos me iré con música de fondo.
Esta canción acompaña la parte de la película "Los inmortales" que siempre me emocionó y me dió mucho que pensar. Mientras mis amigos disfrutaban con los combates y las cabezas cercenadas, yo me estremecía con la historia de amor del protagonista. Igual es que soy un rarito. ¿Quién quiere vivir para siempre? Desde luego yo no, porque la eternidad sin ti se me presenta más como un castigo que cómo cualquier otra cosa. La vida me ha enseñado que sobrevivir a la persona amada debe ser lo más parecido a un infierno. Lo veo cada día en la persona de mi madre que perdió a su amor tras cincuenta años de vida en común. Si ese medio siglo le ha dejado tal dolor, no quisiera imaginarme el pasar toda una eternidad recordando y, saber que por mucho que se desee, no le podrás reencontrar en ningún lugar. No soy un escocés melenudo y desde luego no soy inmortal, aunque he tenido mucha suerte pero creo que ya no me quedan más rascas de esos de "sigue jugando". Una cosa es que considere vivir plenamente a vivir enamorado y que ese sentimiento sea el motor que hace que se mueva no solo mi corazón, sino también mi cabeza, mis músculos y mis cortas patitas y otra, el que me vaya a morir cuando se me rompa el corazón. Lo tengo lleno de remiendos y el bueno de Alejandro Sanz ha dejado sin existencias de "tiritas pa este corazón partio" a las farmacias de toda España. En cualquier caso he aprendido esgrima con el mejor maestro y nunca volveré a rendirme sin plantar batalla. Lo bueno, lo que realmente merece la pena, siempre supone un esfuerzo. Nadie regala nada. Menos mal que al menos no me toca pelear con la típica faldita escocesa, fijo que me la terminaría pisando y al final me cortarían la cabeza con el culo al aire. Yo no quiero vivir para siempre. Mi único sueño de inmortalidad se basa en lograr trascender con alguno de mis textos y en dejar el mejor de los recuerdos en aquellos que me conocieron. De todas maneras si por lo que sea me vuelvo inmortal, que también se lo concedan a ella.
Necesito dormir una media de al menos ocho horas diarias para poder colmar de bendiciones en mis sueños a tantas y tantas mujeres que pasaron por mi vida y de las que creí estar enamorado. Aunque la mayoría me han echado en el abandono, yo siempre conservaré un recuerdo hermoso de lo que me confundió hasta el extremo y me llevó a pronunciar esas palabras tan devaluadas y desvirtuadas hoy en día: Te quiero. Creo que ya he llorado toda mi reserva de lágrimas negras y ahora tiendo más a sonreír y cuando mis ojos se empañan por el motivo que sea (eso no dejará de suceder nunca), lloro lágrimas a juego con el color que ella ha elegido para sus uñas ese día. De pequeño me enseñaron que los chicos no lloran y por si no me había quedado claro, un poco más tarde me lo cantó con mucho ritmo Miguel Bosé, añadiendo que no solo no lloran, sino que tienen que pelear. Soy de naturaleza pacífica y más dado a las emociones y a la sensibilidad que a los cabezazos en la nariz o a los rodillazos en la boca, aunque llegado el caso no seré yo el que rinda mi espada sin sacarla de la vaina. Es curioso este proceso de aprendizaje al que llamamos vida. De lo mucho que estoy aprendiendo ( y prometo que aprendo deprisa) lo que más me ha impactado es descubrir que las cosas nunca pasan porque sí, sino porque tienen que pasar. Que todos los actos llevan aparejados una consecuencia y que de esa consecuencia puedes correr pero no esconderte. Que a veces se produce un repentino y extremadamente violento oleaje y la nave en la que surcas el océano de la existencia se escora a uno y a otro lado bruscamente y algún compañero de viaje cae por la borda sin que puedas apenas despedirte ni lanzarle un salvavidas. Cuando consigues arriar el bote de emergencia ya es demasiado tarde y entonces vuelven a teñirse de negro todas tus lágrimas. He aprendido que el amor duele. Bueno, más que el amor, lo que duele es ese sucedáneo que solemos adquirir a precio asequible pero que obviamente es de menor calidad. Cuando pruebas el amor verdadero, no solo es que no duela, es que te sirve de bálsamo para muchas otras dolencias y lo único que puede llegar a doler o a molestar intensamente, es el miedo a perderlo. Me estoy especializando en el relato, aunque trabajo otros géneros pero siempre, en todos mis textos, el amor está muy presente. Da igual que escriba sobre el fin del mundo, los crímenes de un asesino en serie o la guerra de secesión americana. Siempre hay de fondo una historia de amor. Esto me ha llevado a recibir críticas e incluso a ser blanco del sarcasmo y la ironía de muchos pero me vais a perdonar la expresión, "me la bufa". Yo soy como soy y, escribo como escribo y sobre lo que me apetece escribir y no sé porqué el amor es tan importante y tan recurrente en mi. Quizás ese aprendizaje tan exhaustivo me ha llevado a donde estoy ahora y sin mis continuos fracasos no hubiera podido alcanzar esta cima. Todo es necesario y de todo se aprende y fracasar termina enriqueciendo. Tan solo espero no volver a hacerlo. Ha llegado el momento de aplicar los conocimientos adquiridos. Ha llegado el momento de estar a la altura.
Buen viaje cariño. Al fin has despertado Blanca nieves. Tonto de mí, supuse que despertarías en mi mundo pero gracias a Dios has despertado en un lugar mucho mejor, sin sufrimiento y sin angustia, en el lugar donde mereces comenzar una vida nueva. Estás llegando, te queda muy, muy poquito de viaje y seguramente te instalarás en una vivienda a la altura de tu corazón, con una inmensa parcela llena de flores casi tan bonitas como tú y donde corretearan ardillas y cervatillos, como en las películas de Disney. No te imaginas cuánto te voy a echar de menos, cuánto, te vamos a echar de menos. Esto no es un adiós, es un hasta luego cielo, nos veremos cuando toque, cuando cuadre, cuando ya no tenga más que dar a los mios. No te voy a engañar, me muero por reencontrarme contigo, con mi padre y con todos aquéllos que habéis ido por delante. No sé porqué mi billete no debía de cubrir todo el trayecto y el revisor celestial me dio una tremenda patada en el culo y me devolvió a la casilla de salida. Si sé porqué. Para conocerla a ella. En mi vida he tenido la inmensa fortuna de conocer a mujeres tan increíblemente maravillosas como tú pero tan solo ella era la que me estaba asignada y las demás me ayudastéis a estar a la altura con vuestro cariño, vuestros consejos y vuestras indicaciones. No sabes cuánto te he querido y cuanto te voy a querer siempre. No te olvidaré jamás. No podría aunque quisiera. En mis recuerdos siempre serás esa morenita pizpireta y guapetona que bailaba en mi boda y que compartió mis momentos de felicidad y me ofreció su hombro en los momentos de angustia. Fuiste una gran amiga, eres una gran amiga y por favor, desde donde quiera que este tu nueva residencia, sigue cuidando de mí. Cuida de nosotros y dale un beso enorme a mi padre. Dile que intento seguir su ejemplo, cuidar a mis amigos y no defraudar a nadie, por difícil que esto sea. Quiero ser la mejor persona que pueda ser y ganarme mi billete para llegar hasta vosotros el día de mañana.Prometo esforzarme en ello y no dejarme tentar por tantas y tantas estupideces con las que pueden corromper el alma. Lucharé para que mi alma sea tan pura como la tuya. Fuiste mi Blanca nieves, mi Bella durmiente y mi referente en un mundo de cuento en el que siempre ganaba el bien y derrotaba a los ejércitos de la sombra, aunque fuera como has hecho tu, dejando una estela de luz que ilumina todos y cada uno de los rincones oscuros de este puto planeta. Perdona amiga, me conoces bien y sabes que me dejo llevar. Nunca olvidaré nuestras conversaciones, nuestros ratos de asueto y nuestros momentos de comunión. Vivirás en mi. Vivirás en muchos. Hoy me despido de ti. Eras una de las más asiduas lectoras de mi blog y sé que de alguna manera leerás esta entrada. Te quiero mucho, no lo olvides nunca. Siempre estaré contigo, sea de la forma que sea. Descansa en paz, cielo. Descansa. Te mereces descansar y ser feliz.
Que sepas que no te librarás de mí tan facilmente. Siempre viviré en ti. De una manera o de otra tendrás que responder de tu parte de la hipoteca contratada para afrontar el pago de la parcela que adquirimos juntos en Nunca Jamás. Parece que el amor te calma, muy bien , cojonudo. ¿Te has parado a preguntar cómo me siento yo? Durante años me convertiste en tu alter ego y no te privaste de escribir docenas y docenas de textos en mi nombre, de tratar de seducir a Campanilla y de acostarte con cuanta sirena y princesa india se te puso a tiro. Debería darte vergüenza. vestías como yo, cacareabas como yo e incluso trataste de volar sin darte cuenta de que te habías pulido todo el polvo de hadas que me robaste y claro, te pegaste el hostión del siglo y casi la palmas. Pero yo seguí ahí, a tu lado. No te abandoné nunca y es más, aporté cuanta energía y fuerza necesitaste para salir del pozo. Y así me lo pagas. No te voy a mentir, entiendo lo que te esta pasando. Es una belleza y un encanto de mujer y además parece ser que realmente es la que estabas esperando desde los quince años. No te quedan más cojones que madurar y ofrecer la mejor versión de ti mismo y claro, ahí ya no entro yo, que antes quedaba guay con mi gorrito con pluma y mis calzas verdes pero ahora parece que ya no resulto igual de encantador. Si incluso llegaste a hacerte coleguita del Capitán Garfio y salir de pedo con él. A donde vamos a parar. Te perdono, Juan. Entiendo que ya vas teniendo una edad, que la vida se te puso difícil y te asustaste y que por fin has encontrado a quien estabas buscando. No soy rencoroso y te perdono .Siempre me tendrás aquí, aunque tendrás que buscar bien para encontrarme en el fondo de tu alma y convencerme para que vuelva a salir. La vida pasa y pesa y veo que te ha pasado de todo y te ha pesado demasiado. Entiendo que necesites tomar las riendas y apartarte un poco del eterno adolescente, del niño que soy, ese niño que se resiste a crecer. Al fin y al cabo esa resistencia es mi lucha, no tienes porqué arrimar el hombro. Te deseo mucha suerte. Que Campanilla te cuide...y te guarde.
Asustado e impaciente volvió a mirar el relój y le asaltó la desesperación cuando comprobó que quedaba menos de una hora hora para que terminase el tiempo que marcaban las bases del certamen, y que tendría que entregar el relato o abandonar el lugar del concurso con la detestable sensación de haber fracasado una vez más. No entendía porqué pero estaba completamente vacío de inspiración y el tema sorpresa que había propuesto el director del jurado: "Paseando por el acantilado", no terminaba de evocarle más que sandeces romanticonas o diversas variaciones sobre un homicidio de lo más vulgar. Ver como la joven escritora que se había sentado en la silla contigua a la suya, no paraba de rellenar un folio detrás de otro, le comenzó a despertar un sentimiento a caballo entre la envidia y el odio. Envidiaba esa inspiración latente en la premura con la que escribía sin detenerse apenas y odiaba la expresión de catarsis y climax creativo que evidenciaba su rostro, semioculto bajo unas enormes gafas de pasta. No estaba mal del todo, pese a no ser su tipo. Debería tener unos treinta años más o menos, el cabello muy corto y teñido de rubio platino y una ausencia casi total de formas femeninas. A él siempre le gustó la "mujer, mujer", con sus curvas y sus formas bien definidas. Parece que ahora la moda y los gustos sociales han impuesto una mujer de lo más andrógina, puede que para seguir rompiendo diferencias entre sexos. Maldijo no poder encender un cigarrillo liberador y terapéutico, puta ley antitabaco. Su descomunal cabreo con el mundo y consigo mismo siguió creciendo y comenzó a rayar la psicosis. Alguien de la organización del certamen, avisó que quedaban tan solo diez minutos para que finalizase el concurso. Dejó escapar un enorme suspiro que hizo que los participantes que aún permanecían en la sala se girasen a mirarlo, con lástima mal disimulada. Aquello fue la gota que colmó el vaso. Agarró a su compañera por el pelo y le hundió en la nuca y la garganta su pluma estilográfica repetidas veces con extrema violencia. La sangre le empapó la camisa oxford azul que se ponía para los certámenes literarios, su "camisa de la suerte". Los gritos de horror del resto de participantes le sacaron de la abstracción homicida y dirigió su rabia contra el escritor más cercano, que estaba encendiendo su teléfono móvil para seguramente llamar a la policía pidiendo ayuda. Le rompió la cabeza de un certero golpe con la silla de aluminio vacía de la concursante que agonizaba en el suelo con ambas manos tratando de cortar la hemorragía. Rápidamente se colocó junto a la única puerta de la sala cortando la huida de los rezagados y tomando un paraguas del paragüero cercano, clavó su afilada punta metálica en el pecho de otro concursante. El primer disparo efectuado por el guardia de seguridad le alcanzó en la cabeza, en plena vorágine asesina, mientras hundía una y otra vez el paraguas en la espalda de una escritora que al caminar con muletas no había conseguido escapar de aquella locura. La bala del treinta y ocho le salió por la frente , reventando su cerebro y matándolo en el acto. No fue premiado en el concurso, ni tan siquiera un accésit.
Te gustaba bailar y te gustaba esta canción pero sigues dormidita y ahora mismo solo puedes bailar en sueños. Sabes que yo era más de quedarme en la barra por miedo a hacer el ridículo con mi torpeza pero si el destino nos concede otro baile, no dudaré en salir a la pista contigo y bailar hasta dislocarme la cadera. Estás dormida desde hace ya demasiado tiempo pero no te preocupes, si consigues despertar estaremos aquí esperándote todos aquellos que hemos tenido la inmensa fortuna de conocerte. En mala hora mordiste esa manzana envenenada, en mala hora sucumbiste a su hechizo y caíste en este letargo que te apartó de nosotros. Somos muchos los que celebraremos tu regreso y somos muchos los que cada noche te dedicamos un recuerdo, una oración y una sonrisa. Te echamos de menos y aunque escaso, nos queda el consuelo de que allá donde estás ahora al menos no sufres. Ojala esto fuese un cuento y ojala apareciese de repente el príncipe azul que te despertase con un beso. Eres una princesa, no te quepa la menor duda. Eres una mujer increíble y un Ser humano magnífico pero eso no hace falta que te lo recuerde yo. Eres mi amiga y se me hace muy dura tu ausencia aunque sé que de alguna manera necesitabas echar un sueñecito y desconectar un rato del mundanal ruido. Yo creo que ya has dormido lo suficiente, ya puedes abrir los ojos y volver a nosotros. Necesitamos verte sonreír y necesitamos abrazarte. El día que finalice el encantamiento, celebraremos una fiesta a la que invitaremos a todos los súbditos del reino y habrá bailes en tu honor en todos los palacios del planeta. Te quiero, amiga. Te esperaré el tiempo que haga falta.
En efecto, tienes lo que yo quiero pero prefieres que te lo pida y aunque desde pequeño me enseñaron que "contra el vicio de pedir, la virtud de no dar" no voy a callarme ninguno de mis deseos. Estudié en un colegio de jesuitas y pese a ser cristiano, no consiguieron convencerme de que el sexo es pecado. No al menos el sexo tal y como yo lo entiendo y disfruto. Puede que sea pecado el sexo que se obtiene forzando, humillando o manipulando a otras personas y de eso sí que podrían darme lecciones aquellos miembros de la Iglesia que han confundido la manera de transmitir y enseñar el amor de Dios, deshonrando la memoria y el recuerdo de tantos y tantos religiosos que han dedicado su vida a la fe y a la educación, sin haber ensuciado en absoluto los ideales y creencias que les llevaron a ello. Mientras me desnudo y te espero en la cama, borro de mi conciencia cualquier tabú que pueda estropearnos el momento y me dispongo a entregarme a ti en cuerpo y alma. Entonces realizas una entrada triunfal en el dormitorio iluminado por la tenue luz de media docena de velas, al ritmo de una canción de mi rapera favorita. Siempre me sugirió mucho contemplar una mujer hermosa capaz de conferir elegancia y belleza a la combinación de zapatos de tacón con ropa interior minúscula y en esta ocasión, tan erótica y fantástica visión me hace enmudecer en el acto pero tú, mujer tan inteligente como hermosa, al percatarte de ello, clavas tus ojazos en los mios y dices pronunciando cada palabra con gran lujuria : "pide por esa boquita". Mi cuerpo reacciona de inmediato y un calor intenso se apodera de todo mi ser, secándome la garganta. El corazón me late a mil por hora y parece que toda la sangre de mis venas acude a fortalecer la erección más intensa de mi historia. Creo que por la repentina y total ausencia de saliva, no seré capaz de pronunciar palabra pero entonces sucede el milagro y con voz alta y clara te pido que te pongas de rodillas. Tras unos minutos de éxtasis total en los que tu lengua y tus manos toman al asalto la parte más delicada de mi ser, consigo volver a articular palabra y complaces mi segunda petición adoptando una nueva posición amatoria en la que ambos disfrutamos al tiempo del sabor y de la calidez de nuestros sexos. Antes de terminar de perder el control sobre mi voluntad, consigo incorporarme y en cuestión de segundos cabalgo sobre ti agarrado a tus caderas. Puestos a pedirte cosas me inclino sobre tu espalda y te pido al oído que por favor me regales un orgasmo a la altura de la situación.A tenor de lo entrecortado de la respiración que acompaña cada uno de tus movimientos y de lo excepcionalmente húmedo de tu interior, creo que no soy el único que ha disfrutado de nuestra pequeña conversación durante este encontronazo. Te liberas de mi presa, me derribas y te decides por ser tú la que lleve las riendas de la situación a horcajadas sobre mi. Así nos encuentra un descomunal orgasmo que nos llega a ambos al tiempo finiquitando el combate, fundiéndonos en un amoroso y férreo abrazo. Una vez más queda demostrado lo importante de una buena comunicación, si esta fuese mejor entre los seres humanos, las cosas serían completamente diferentes. El respeto, la confianza y la comunicación son elementos que al sumarse al amor pueden sustentarlo todo.
Así quisiera que me encontrase la parca, juntando letras. Se conoce que aquel 13 de abril de hace un par de años no había escrito nada que mereciese la pena aun y por lo tanto no era mi momento así que se me concedió una prórroga. Voy a tratar de aprovecharla. Estas oportunidades nunca son gratuitas. Por lo que veo si que he sido capaz de escribir algo realmente bueno y oportuno: ni más ni menos que el mensaje de S.O.S. que llego hasta ella dentro de una botella de granadina (como no podía ser de otra forma) que conseguí lanzar con la fuerza que te confiere la desesperación y el oleaje del mediterráneo la hizo llegar hasta la playa de Málaga donde había ido a pegarse un baño. Resumiré el contenido del mensaje en un "Me muero por quererte, y esto no es una frase hecha". Se conoce que algo se removió en su interior y me encontró a través de las redes sociales. Bendito Facebook. La literatura nos unió, pues ella también escribe y es una gran lectora. La he saturado con mis historias impresas y ha saltado del "Historias para según que días" a una edición de prueba de "Temporada de setas" y para rematar,está digiriendo mi "Juantierasmus". Y todavía me quiere. El día que vuelva la pálida señora, que me pille con Gatete en el regazo, con una mano en el teclado escribiendo en este blog y con la otra acariciando a mi chica. Solo pido eso. Mientras tanto prometo esforzarme a más no poder y escuchar las indicaciones de mi genial editora, amiga y consejera, que está sacando lo mejor de mí y está haciéndome trabajar muy duro para que todo esto no se quede en un sueño. Cómo ya he escrito en muchas ocasiones soy luchador y no tiro facilmente la toalla. Mi idea de la felicidad absoluta, pasa por celebrar con la que espero sea mi futura y definitiva esposa, la publicación de una novela realmente buena. Nadie regala nada. Todo implica esfuerzo, ilusión y muchas, muchas ganas y, creo que de eso me sobra. Otra cosa es el talento y la calidad pero conseguiré desarrollar ambas cosas hasta dar con el resultado soñado. Siento haber convertido este blog en un campo de pruebas donde experimentar con diferentes estilos, al escribir relatos de todo tipo para ver si me siento suelto abordando todo tipo de temáticas, aunque el que nace lechón, muere cochino y renace más lechón que nunca y, el romanticismo es el leit motiv de la mayoría de mis textos. Una de las labores diarias que más me aporta y más me gusta es leer. Leo a todo tipo de autores y trato de aprender de ellos. Me han descubierto a verdaderos genios literarios como Carver o Banville que me han enseñado que un relato puede contener en pocas páginas toda la intensidad y la fuerza de la novela más extensa y que al crear un personaje, te conviertes en su padre y en su Dios, modelándolo a tu propia semejanza si así lo quieres o escribiéndolo completamente diferente a ti pero dotándolo de la credibilidad necesaria para que cale en los lectores. Escribir no es fácil. Escribir bien es francamente difícil pero soy un amante de los retos. También me dijeron que encontrar a la mujer perfecta era prácticamente imposible pero lo he hecho. Ahora me largaré en busca del Santo Grial y del Arca de la alianza, eso está chupado. Tengo la fuerza. Lo sé, la siento en mí, Puede que se me esté yendo la pelota pero no os preocupéis, tengo bien claro que "poderoso el reverso tenebroso de la fuerza es".
Con la venia de su señoría, llamaré a testificar al doctor Arriate, presidente del ilustre Colegio de Veterinarios de Valladolid. Dado que el ministerio fiscal ha solicitado la pena más elevada para el delito del que se acusa al señor Gatete, mi defendido; esta defensa considera que deben tenerse en cuenta todos los eximentes que puedan atenuar su condena. Si bien es cierto que Gatete actuó con premeditación, alevosía y nocturnidad, el testimonio del testigo de la defensa que subirá al estrado para aportar credibilidad y fundamento científico a mi alegato, demostrará que Gatete no se encontraba en plena posesión de sus facultades mentales. Como se expondrá ante este tribunal, ya ha sido demostrado con anterioridad y a continuación aportaré la pertinente jurisprudencia al respecto, que al combinarse la ingesta de comida para el control de bolas de pelo con productos lácteos, se producen una serie de alteraciones neuronales que pueden derivar en conductas psicópatas con el consiguiente peligro para la seguridad del paciente que sufre dichos trastornos y de su entorno. Mi defendido confundió la realidad al estar bajo los efectos psicotrópicos de esta peligrosa mezcla y durante un periodo no inferior a siete días, creyó tratarse de un reputado cirujano ocular al que la familia que ocupa el domicilio contiguo al suyo, había encargado una complicada cirugía de las corneas de ambos ojos de su perrita cocker spaniel. En un descuido del humano con el que vive, Gatete escapó de su control a través de un agujero en la valla que circunlimita la propiedad y si bien es cierto que se introdujo en la caseta de la perra "Bora", al ser esta una construccíon prefabricada que no consta en el registro de la propiedad de Valladolid, no puede considerarse como domicilio particular y pedimos al tribunal que no proceda la acusación por el delito de allanamiento de morada. Una vez dentro encontró a la supuesta víctima en un profundo sueño producido por la ingesta de una cazuela llena hasta los topes de arroz cocido con pollo por lo que mi defendido renunció a la idea inicial de utilizar anestésicos y procedió directamente a operar. En un momento de lucidez, Gatete esterilizo las uñas de su pata delantera derecha y tras comprobar lo aséptico de su filo realizó las incisiones con gran pericia. A continuación el testigo de la defensa corroborará lo afirmado en este alegato. Concluyendo. La defensa pide que se tengan en cuenta los eximentes y que se reduzca lo máximo la petición de pena por parte de la acusación particular y del ministerio fiscal.