lunes, 27 de agosto de 2018

Tanto amor que dar

El último estado que he publicado en mi muro de Facebook me ha hecho pensar y eso me ha llevado directamente aquí, porque las redes sociales se quedan cortas para ese caudal de emociones que resquebraja continuamente la presa de mi pecho.
El amor...manda cojones que precisamente haya elegido un tema de Julio Iglesias para encabezar esta entrada, pero es que realmente me parece una letra muy acertada la de esta canción. Vale que él  ha repartido demasiado "amor" entre cientos de mujeres ( igual hasta  me quedo corto), pero yo he aprendido que una cosa es amar y otra hacer deporte o incluso practicar el onanismo sustituyendo la mano por otro cuerpo.
Hoy también he descubierto que eso que me lleva machacando toda la existencia se ha calificado por los expertos como P.A.S. 
Pues muy bien. Mola que le pongan nombre a las cosas. Ahora además de ser un tipo bajito con el bigote bicolor, soy una "Persona de Alta Sensibilidad". Chachi.
A raíz de ciertas catastróficas desdichas, me ha cambiado por completo la visión de la vida y aunque siempre he sido un tipo excesivamente sensible, no sabía canalizar los sentimientos y confundía emociones al creer que el cariño, el interés, la afinidad, la necesidad, la pasión o incluso la lujuria eran amor. Pues no.
Antes le daba demasiada importancia a cosas triviales y absolutamente carentes de ella, como el dinero, la posición, la popularidad, el físico... dejando en un segundo plano lo más importante y lo que realmente define a una persona y la hace ser como es, guste o no.  Y no se puede gustar a todos. Ni se debe.
Pasar por situaciones extremadamente difíciles, por pérdidas desoladoras e irrecuperables y por estados desconocidos para mi como la depresión y la soledad  me han enseñado el verdadero significado de palabras como Familia o Amigo. 
No nos confundamos, de cañas todos somos encantadores y super colegas, pero aquellos por los que moriría o mataría y que morirían o matearían por mi pertenecen por pleno derecho a uno de estos dos grupos que acabo de mencionar: la familia y los amigos.
Y por supuesto amo. 
Amo a mi familia, que siempre ha estado ahí y que ha sufrido conmigo, ha peleado conmigo y ha reído conmigo. A todos mis familiares sin excepción, que han sabido perdonar e incluso amar mis carencias y mis muchos errores.
Amo a mis amigos (que nadie se enfade  por utilizar el masculino para hablar de amigos y amigas, pero no pienso contribuir a destrozar mi idioma). Amo con locura a Gatete y a otros muchos animales de mi tribu. Y desde hace no demasiado amo también de esa forma que solemos encontrar en los culebrones y en las novelas románticas, en los poemas más cursis y en las canciones de Albano y Romina. Y de Los Pecos.
Y ella es una mujer generosa y moral y emocionalmete muy superior a lo que estaba acostumbrado en mi vida de pareja, pues me ha conocido en profundidad y me entiende y comprende lo emocional y lo enamoradizo que soy y, aunque sabe que la amo, es la primera que no se cansa de decirme que si un día descubro que me he enamorado de otra persona, que no sea idiota y que se lo diga, que será la primera en animarme a intentar vivir y disfrutar lo que a ella le resulta demasiado difícil darme ( y por supuesto no es amor, sino tiempo en común y estabilidad).
Tengo mucho amor que dar y eso me lleva destrozando desde que era un niño y haciendome sentir incomprendido y casi desgraciado. A veces, confundido por los estereotipos y los roles impuestos por la sociedad  he llegado incluso a dudar de mi sexualidad, pues tengo amigos a los que adoro y sin los que mi vida estaría vacía y pensé que igual estaba enamorado de ellos y era gay, aunque no me atrajesen físicamente ni me apeteciese tener sexo con ellos. No tiene nada que ver una cosa con la otra. Soy heterosexual, pero amo por igual a mis amigas y a mis amigos. Mi corazón se ensancha del mismo modo cuando oigo la voz de Mónica que cuando oigo la de Chuchi y mi vida me resulta igual de estupenda y  completa cuando veo a María o a Vero que cuando veo a Paddy o a Guille. 
Soy rico en amigos y esa es la única riqueza que no quiero perder nunca. He estado a punto de perder a amigos sin los que no podría avanzar y no hubiese podido salir de los siete infiernos por donde he andado haciendo turismo. Y mis fallos, mi insensatez e incluso mi egoísmo han dinamitado la roca más dura y sólida del mundo, la de la amistad. Pero gracias al cielo no llegué a colocar una carga lo suficientemente grande como para volatilizarla. Y aun podré abrazarme a su intensa presencia, su increíble paciencia y su generoso perdón, incluso en la distancia.
Y el destino a veces se molesta en señalar con neones de colores a aquellas o a aquellos que no debo dejar escapar de mi vida y que con seguridad, ya he compartido mucho en otras existencias pasadas. Y Dios, Supergato, o quien sea el que maneja los hilos, me ha dado la capacidad de poder poner por escrito mis angustias, mis miedos y mis mayores alegrías.
Y estoy feliz por amar y por saberme amado por unos cuantos. Los justos, los necesarios. Mujeres increíbles, hadas diminutas, Indias deliciosas, tipos duros, tipos sensibles en su dureza, perros y gatos incluidos.




jueves, 23 de agosto de 2018

Se veía venir

Cuando Charlie recibió el informe de los compañeros de la comisaria, acompañado del informe forense tras la autopsia a los tres cadáveres, estuvo tentado de volarse la cabeza con su arma reglamentaria. Se veía venir, pero su hija nunca quiso hacerle caso. Bella y su manía de hablar despacio pensar despacio y actuar despacio, poniendo caritas mietras posa incansablemente para el objetivo de la cámara del destino.
Habían encontrado los cuerpos en el interior de una tienda de campaña en la cima del pico más elevado de la cordillera que rodeaba Forks. No sabía porqué coño había tenido que irse de acampada con aquellos dos jovencitos que seguían su rastro constantemente cual animales en celo. El despliegue de hormonas de Bella había atraído a toda la fauna en quinientas millas a la redonda.
Su hija era estupenda y lo sabia. Era guapísima y lo sabia. Y tenía a aquellos dos peleles completamente entregados. Y lo sabia. Pero Charlie nunca hubiese imaginado aquél final para el trio de víctimas del angelote arquero con problemas en las corneas.
Sloan, el agente más joven de la unidad, tuvo que salir a vomitar al adentrarse en la tienda pues la visión de aquellos cuerpos un tiempo hermosos y ahora completamete destrozados pudo con su pueril entrega al deber. "Para servir y proteger" rezaba la inscripción de su placa, pero no decía nada de pasar esos malos ratos.
A Bella le habían seccionado ambos pechos y le habían abierto la garganta de lado a lado. Debió de tardar en morir y sufrió.  Sufrió de una forma inimaginable. Estaba hasta fea, ella...que soñaba con dejar un bonito cadáver.
Edward, que era un muchacho de exquisitas facciones y cuerpo de modelo de pasarela, había recibido tantos golpes que se asemejaba más a los restos de una piñata tras el cumpleaños de un adolescente mexicano borracho de mezcal y tequila reposado.
Lo peor fue lo de Jacob, le caía bien aquel joven nativo americano de malas pulgas que solía rascarse tras las orejas con excesiva frecuencia y mearse en todos los arboles del jardín de su casa. A Jacob le habían arrancado la cabellera y tras abrirse paso a través del cuero cabelludo, alguien le había devorado el pequeño cerebro. El rigor mortis del cuerpo demostraba que los enormes pectorales en tensión y los potentes biceps del chaval, se habían empleado a fondo. El hecho de tener absolutamente todos los nudillos rotos, no dejaba lugar a dudas sobre los golpes recibidos por el mayor de los Cullen.
El informe del departamento forense, indicaba que en el recto de Jacob se encontraron restos de semen de Edward y en el de Edward, restos de semen de Jacob. Lo peor era que encontraron restos de ambos fluidos en los labios de su hija, en su vagina y también en el recto. "Por ahí, ni el pelo de una gamba", le había dicho su madre antes de largarse a vivir con su amante, pero Bella siempre iba a su rollo y sabía que a los tios de ahora lo del sexo anal les hace mucha gracia, sobre todo cuando una chica va de recatada y estrecha.
Aquello no tenía sentido pues en los alrededores de la tienda no se encontraron restos de alcohol ni de drogas de ningún tipo y la sangre de los tres cadáveres dio negativo en alcohol y drogas. Únicamente se demostró que casualmente los tres eran diabéticos. Aquello no sorprendió al desconsolado policía. Las conversaciones entre su hija y aquello niñatos rezumaban tal cantidad de azúcar que sus páncreas se veían sobreforzados a la continua fabricación de insulina y claro, entre las palabras bonitas, las miraditas y los continuos suspiros, una muerte por coma diabético hubiese sido mucho más natural que aquella bacanal de sexo y sangre. Pero desde luego...cualquiera entiende a los jóvenes de ahora.
Lo que si que está claro es que una mujer nunca debería jugar con dos hombres a la vez (cosa que en absoluto justificaría ningún tipo de violencia hacia ella) y que esos dos hombres, enamorados de la misma fémina y deseosos de saciar sus apetitos con ella, nunca podrían ser amigos. En cualquier caso y como mucho, compañeros de borrachera. Pero encima aquellos mojigatos en vez de irse de pedo con los colegas y quedar luego para dare de hostias y arreglar sus diferencias, como los muchachos decentes, se pasaban el día corriendo desnudos por el bosque y subiéndose a los árboles.
Charlie no llegó a comprender aquel espantoso final para el trio más popular del instituto. Interrogó a Sam, el amigo chulo y  bocazas de Jacob, esperando que le explicase algo y con tal intención y un extra de amor paternal, llegó a a excederse un poco en la sala de interrogatorios, pero aunque le arrancó una a una las veinte uñas con unos alicates oxidados y le rajó la espalda con un cuter mellado, no consiguió ninguna explicación convincente, eso sí, confesó haber matado a Kenedy y a Jose Antonio.
Mientras los de asuntos internos trasladaban a Sam a la enfermería y detenían a Charlie, este pudo escuchar como Sam gritaba: "lo que le ha pasado a tu hija bien está, se veía venir, por pedorra y creída, pero lo de mi colega Jacob ha sido una putada. Al Cullen que le jodan, nunca tendría que haberse instalado en este pueblo con los pedantes de sus hermanos, ni haber perseguido a la hembra  de uno de mi manada." Manada...Charlie odiaba el sentido que algunos niñatos gilipollas y prepotentes le daban a ese término.
A Charlie e abrieron expediente y tras despojarle de su placa y su arma, lo echaron del cuerpo.
Ahora trabaja de segurata en un garito del Bronx y se gasta una mala leche que hasta los camellos de Harlem lo llaman " el quemao". Al salir de trabajar, acostumbra a ver películas de esas para adolescentes, que son las únicas que no le hacen pensar ni recordar lo triste de la muerte de su hija. Seguramente porque son todas tan patéticas y tan carentes de sentido que de alguna manera le evitan utilizar su torturado cerebro.

miércoles, 22 de agosto de 2018

Solo quiero seguir hablando contigo

Ayer noche, en compañía de una amiga poeta, volví a ver esta joya del cine español ganadora de diversos premios y que llevaron a cabo mi amigo el espejeño Alberto Del Campo y el afamado e innovador director Rodrigo Sorogoyen.
Y una vez más me revolvió las entrañas hasta la saciedad y me llevó a tu recuerdo, mi querida y añorada Blancanieves.
Yo me identifico con facilidad con el protagonista masculino, con el que tenía muchas cosas en común hace algunos años, no tantos pero los suficientes para no haber sabido estar a la altura cuando más me necesitaste. A la actriz protagonista me resulta inevitable no identificarla contigo, pues además de que también es preciosa, los ojos tristes y la languidez con la que mira me llevan a algunos momentos junto a ti. Y esas conversaciones que mantienen, y esos besos que se roban el uno al otro. Y ese final.
Te añoro cada día, te recuerdo más de lo que quizás debiera recordarte. Vives en mi y en todos los que te quisimos.
También vivimos nuestra pequeña historia de amor, pero mucho más allá de besos y ratos de cama, el amor que nació entre nosotros se consolidó como la amistad más hermosa. Y te fallé. No supe estar a la altura de tus necesidades y arroparte en tu sufrimiento. No supe ayudarte cuando todo se volvió oscuro y eso me machaca a diario, porque tú me ayudaste mucho en los momentos más espantosos de mi vida.
Creo que te voy a querer siempre y sé que un día volveremos a vernos, pero aún no. Guardarme un sitio a tu lado en la pista de baile. Igual hasta bailo y todo.
Te añoro, te quiero y te llevo dentro, Belén.

domingo, 19 de agosto de 2018

¿Valiente?

A veces ser valiente si que es solo cuestión de suerte.
No soy valiente, creo que no lo he sido nunca, al menos no especialmente. Soy un tipo normal que cada día escoge el disfraz más apropiado de la guardarropía y se lanza a la aventura de vivir, esperando que resulte lo más fácil posible y que no haya problemas.
No digo lo que no digo ni hago lo que no hago, simplemente lo escribo y lo pongo en boca de personajes creados para enfrentar y afrontar aquello que me aterra y esquivo constantemente y, les hago decir lo que no soy capaz de decir. En ocasiones algo superior a mi comprensión y a mi naturaleza  me posee y cuando menos lo espero me hace demostrar que todos escondemos en nuestro interior un superheroe o un duro de película. En ocasiones he sido capaz de no agachar la cabeza, de no apartar la mirada y de no controlar los epítetos ni los puños. Y la verdad es que no me enorgullezco de ello. Odio la violencia, tanto física como verbal y procuro evitar ese tipo de enfrentamientos. Me resulta tan desagradable hacer daño como que me lo hagan. En alguna ocasión he sido capaz de sacar la cara por aquellos por lo que me dejaría matar.  Y eso si que volvería a hacerlo. No es valor, es amor.
También he sido capaz de apartar los labios de una boca traicionera, de abrochar la blusa que dejaba al descubierto las monedas con la que pretendían pagar el orgullo que me habían arrebatado. Y de acompañar hasta la puerta a los ojos más bonitos, las caderas más insinuantes y los "te quiero" más falsos.  Ahí si que creo que fui valiente porque me tuve que medir con el más poderoso y dominante de mis instintos. Y gané por KO técnico.
El verdadero valor lo he descubierto en aquellos que han decidido plantarle cara a unas adversidades que cual plagas bíblicas, se han cebado con ellos sin atender a razones, esfuerzos, cirugías ni medicaciones.
Y sin embargo con cada sonrisa, con cada llamada planteando quedar a tomar un vino, hacer una excursión  o ir a un concierto, me dan una lección de coraje. Ellos quieren VIVIR, así con mayúsculas y aprovechar cada minuto de la aventura que les ha tocado en suerte. Reconozco que envidio su fortaleza y su valor Mucho. Quisiera ser la mitad de la mitad de lo valientes que son algunas personas de mi círculo más cercano.
No tengo miedo a la oscuridad, ni a los espíritus, monstruos o psicópatas de la variada, poco original  y abundante  filmografia de terror.Tengo miedo a la soledad, a pensar demasiado, a darle vueltas a las cosas, a recordar los momentos más duros, más tristes y más difíciles. Tengo miedo a estar a solo a hurgar en cada herida y caer en la tentación de recordar una y otra vez  los momentos más duros, más tristes y más difíciles. Tengo miedo a estar a solas conmigo y a hacer introspección. Por eso en cuanto noto que me rondan las ganas de echar la vista atrás y repasar el listado de aquellos seres queridos que he perdido a lo largo de mis cuarenta y cuatro primaveras, busco el libro adecuado, escribo el texto más visceral o marco el teléfono que me llevará hasta la voz que sabrá decirme que deje de temer.
Tengo miedo a defraudar porque sé que durante años y sin poder evitarlo, no he dejado de hacerlo.
Por encima de todo temo hasta la locura volver a enamorarme de quien se hará unas fajitas con mi corazón y mis sentimientos más intensos. Y eso es una verdadera putada, porque no sé quien decidió hacerme tan jodidamente enamoradizo y tan terriblemente sensible a una sonrísa, una mirada o una palabra bonita (sobre todo si la escriben, la declaman, la interpretan, la dibujan o la cantan).
Tengo mucho, muchísimo que aprender y parece que tendré que tropezar con la misma piedra y con todas las piedras de la puta cantera del alma hasta que vuelva a descalabrarme y está vez ya no haya tiempo ni ganas de desfibrilar o de inyectar insulina directa al corazón; un corazón llenito de agujeros, de cicatrices y de costras.
Y me atemoriza en exceso ver a los mios sufrir. Quiero tanto a la gente que quiero que a veces me asusto al pensar que todos tenemos una fecha de caducidad y que aquí no se va a quedar nadie.
Por favor, que venga el encargado, que traigan la hoja de reclamaciones, que me digan donde puedo poner una queja. Ahora entiendo lo del dichoso valle de lágrimas. Y me jode mogollón porque yo soy más de reírme, de imitar a Chiquito y de monetes vestidos de botones que tocan los platillos. Y de vídeos de gatetes haciendo el canelo. De compartir unas risas con mi madre y mis hermanas y de salir corriendo al baño tras una conversación con los amigos más divertidos, mas vividos, más viajeros y con más anécdotas que contar.
¡Que quiero ser feliz, coño! ¿Donde hay que presentar la solicitud? Me da igual que sea por triplicado y con acuse de recibo, me da igual que tengan que sellarla cinco mil funcionarios celestiales, me da igual que tenga que firmarla en cada página y esmerarme con la rúbrica. Quiero ser feliz y solo podré serlo si veo felices a los mios.
¿A quien tengo que votar? ¿A quien hay que untar?¿A quien rezar?
Me da lo mismo ser valiente o ser el más cobarde, gallina, capitán de las sardinas. Pero por favor y a quien corresponda: permítame ser feliz.

sábado, 11 de agosto de 2018

Llegará

Imagino que echarte de menos es algo natural. Y que por las noches todo sea cambio de posturas y encontrar telarañas en las costuras es parte de todo esto.
Lo que es fundamental es llegar a darse cuenta de lo que uno vale, porque sino el mundo es una tonteria. pero de las gordas.
Tanto tiempo de agachar la cabecita y mirar de reojo, asumir puntuaciones ajenas y enarbolar la bandera de la humildad, solo lleva a un enfermizo deseo de ser una avestruz y esconderse bajo tierra. Pero no. 
Soy un felino y se acabó eso de tenerle miedo a lo que se oculta en las sombras. He encontrado la luz que ilumina hasta los rincones más oscuros y he afilado mis garras.
Te invito a que sonrías al futuro, a que mandes a tomar por el culo las angustias, las humillaciones y a las personas dañinas. Perdona todo el daño que te han hecho pero no consientas que vuelvan a hacértelo. Y si te lo hacen, avisa. Un día pasarán bajo el árbol en cuyas ramas estaré agazapado y dispuesto a saltar sobre sus gargantas para saciarme con su sangre y demostrar que el valiente ha sido valiente hasta que el cobarde ha querido.
No derrames ni una lágrima más. No renuncies a ninguna sonrisa y no prescindas de ninguna palabra bonita.
Te echo de menos y aún no hemos compartido más que instantes y porciones de vida, pero han generado un vínculo tal que el día en el que podamos volar juntos, conseguiré escribir el poema perfecto, ese que me quita el sueño y que llevará tu nombre. Ese que siempre he soñado con escribir porque llevo soñándote todas mis vidas. Y un día de repente te acercaste a mi madriguera y me acariciaste el lomo. Y me gustó.
A veces pienso en ti y ronroneo. A veces creo que todo es posible y me decido a dar otro paso adelante. A veces me erizo y bufo al recordar las circunstancias que nos mantienen separados, pero enseguida se me pasa y recupero la calma, porque todo termina llegando, incluso lo bueno.

martes, 7 de agosto de 2018

Bautismo

Al sumergirte en esta particular zona del río Tera, sientes que tu espíritu emerge limpio y renovado, que la vida te da una nueva oportunidad para ser feliz y que los que te rodean, son verdaderos hermanos en esta fe que solo se fundamenta en la amistad y el cariño.
Nuestra religión no tiene nombre, pero en ella las palabras más importantes se escriben con mayúsculas.  Estas palabras, a modo de mandamientos, son AMISTAD, CARIÑO, RESPETO, HOSPITALIDAD y, algunas otras que configuran el decálogo de la creencia que me hará libre. 
Desde el día en que llegué a Espejo de Tera por primera vez, supe que aquel lugar sería tan especial como importante en mi vida. Y que sus habitantes se convertirían en una nueva familia que siempre estaría a mi lado. Y así ha sido.
Podría hablar durante horas de lo hermoso y de lo fuerte del vínculo que me une a esa pedanía soriana, pero con decir que allí me siento seguro, libre, feliz y querido, creo que es más que suficiente.

La naturaleza creó este regalo para quienes saben apreciarlo y no es una playa del Caribe ni la montaña leonesa, pero estoy seguro de que te encantará conocerlo y valorarás cuanto hay allí, porque todo es increíble.
La música y la creatividad en todas sus expresiones son parte fundamental del abono del que se nutren las raíces de cada árbol y de cada planta, del pasto que alimenta al ganado y al hacer la fotosíntesis, del aire que respiran los vecinos y que ensancha sus pulmones, y engrandece sus corazones. 
Allí todo sabe mejor, queda mejor  y se disfruta más. Allí incluso yo me encuentro guapo e interesante. Allí las penas duelen menos, los recuerdos son solo agradables y el amor y todo lo que me alimenta el alma se magnifica.
He podido compartir mi tiempo allí con diferentes personas de la historia de mi vida, pero cuando consiga hacerlo contigo, se cerrará un ciclo que me hará darle gracias a quien sea que maneja el destino y ha puesto este lugar y a estas gentes en mi camino. 
En esta última y necesaria visita, la buena amiga que me ha acompañado junto a su hija llenando todos y cada uno de los minutos de energía positiva, me ha dado una nueva lección de vida al asegurarme que cuando pueda perdonar a quienes culpo de mi mayor daño, encontraré la felicidad completa en el perdón y que ese perdón no será para ellos, sino para mi. Y necesito perdonarme, sacar la basura del interior de mi pecho y convertirme en la persona que quiero llegar a ser, para poder darme de verdad, para poder ofrecerte el mejor producto que han modelado el aprendizaje y la experiencia, el amor y el dolor, el conocimiento y la duda.
Y Espejo de Tera es el lugar ideal para cursar este master de post grado existencial y conseguir el cum laude.