No doy la talla para una cosa y me mareo incluso en la ducha, en el mar ni podéis haceros una idea, lo mio con esto de las letras es la salida más honrosa.
Escuchando la letra de esta canción me descubro constantemente asintiendo con la cabeza, ya que empatizo mucho con el personaje del que habla.
Será porque también camino despacito, ya que descubrí a lo burro que las prisas no son nada buenas.
Soy muy de chaquetas (con camiseta, eso si) pero a mi me enseñaron de pequeño que un caballero no se quita nunca la chaqueta, a no ser que sea para cederla a alguien que esté pasando frío.
También es verdad que después de un invierno malo, suele venir una mala primavera, pero eso mola porque entonces el verano fijo que vendrá cojonudo.
Sonrío al escuchar que este personajillo con el que empatizo tanto, eligió a la más guapa, y a la menos buena. No es mi caso, lo cierto es que en mi caso suelen elegir ellas y hasta la fecha prevalecen aquellas que son muy guapas sobre las que terminan saliendo "menos buenas". Digamos que soy un tipo más que afortunado, aunque de todo ha habido, como en botica o en el Hipercor.
Si habéis leído el cuento de Peter Pan o habéis visto la película, Peter pasa bastante de las sirenas, asi que conocer a una más o menos le iba a terminar dando lo mismo.
Joer con Peter Pan, menudo "sobrau", está la cosa para hacer ascos a las sirenas, sobre todo sabiendo que campanilla va más a su rollo.
No se este señor del que habla la canción que sería capaz de hacer con una princesa india, pero os aseguro que Peter habla arapajoe en la intimidad, como Aznar ¿o era catalán? si es que me hago un lío tremendo con estas cosas yo solito.
Puesto a ser soldadito y marinero, vamos, de la armada, que se enrole en el barco de garfio, que seguro que termina siendo como "El barco" ese de Antena3, que aquello era una casa de...citas.
En cualquier caso me gusta esta canción y muy a mi pesar la he tenido que descartar del próximo espectáculo con Oscar, ya que no podemos llevar setecientos temas cada uno, no preocuparse que no creo que sean más de diez o doce en total, entre otras cosas porque aunque mi logopeda me dio mucha caña y se lo curró un montón, ahora hablo más bajito y parezco el Ozores ese , que se me entiende lo justico.
A ver si aprendo a dosificarme, que vale que yo necesito escribir, pero vosotros no me necesitáis a todas horas, no quiero convertirme en un cansino del mundo blog y mucho menos hartaros con mis historias.
Podría pasarme la vida escribiendo homenajes a su belleza, pero lo voy a dejar aquí por hoy.
Nos vemos por el ciberespacio, que suena guay y además no hay fronteras ni aranceles.