Me parecía un niño peligroso e irresponsable, que tiraba con demasiada facilidad de flechitas.
Descansa en paz, pero no puedo evitar alegrarme. Durante demasiado tiempo me utilizaste como blanco para practicar tu puntería, convirtiéndome en lo más pareció a un alfiletero de la cantidad de saetas que llevaba clavadas.
La primera vez cometí el error de colocarme yo mismo la manzana sobre la cabeza esperando que emularas con la misma fortuna a aquel suizo de leyenda, pero no era más que un pretesto para que me atravesaras el corazón con el venablo de tus hechizos.
Desde entonces me he pasado la vida arrancándome dardos que se iban acumulando hasta casi cubrirme por entero.
Los médicos de urgencias están hasta el pijo de mi y cada poco tiempo repiten el mismo ritual: extracción del objeto punzante, desinfección de la zona y sutura de la herida.
Vale que eras un niño consentido, pero yo también y ya te avisé en su día de que si tu tenías un arco yo tenía una escopeta de cartuchos y bastante precisión en el disparo.
Al final se me han adelantado y aunque siento que hayas tenido un final así, me alegra no haber sido yo el que apretara el gatillo.
Lo que está más que confirmado es que solo tenías una excelente puntería disparando sobre machos, a las hembras no las alcanzabas casi nunca.
Todos los cazadores decentes saben que hay que respetar a las hembras por aquello de no acabar con las especies cinegéticas vale, pero eso de disparar sobre crías manda cojones. A mi me acertaste la primera vez con apenas catorce años y aquella punta aún sigue alojada en mi corazón, no han conseguido extraerla y aunque apenas duele, está latente y de vez en cuando remite y la herida se abre y vuelve a sangrar.
El que a hierro mata a hierro muere y es cierto, el amor mueve el mundo, pero hay movimientos descontrolados que son bastante peligrosos.
No sé quien se ocupará de disparar por ti a partir de ahora, creo que el puesto sigue vacante y con el índice de paro que tenemos seguro que ya hay cientos de solicitudes. Supongo que irá por oposición y espero que además de pruebas prácticas, realicen un buen test de sentido común.
Ojalá a tu suplente no le de por emparejar amores imposibles, de esos que por más que lo deseas no llegan a ninguna parte y terminan volviéndote loco y convirtiéndote en un desgraciado.
Yo era un romántico empedernido, pero de un tiempo a esta parte he adoptado cierta canción de Tonino Carotone como himno y no veas lo que me jode, en el fondo.
2 comentarios:
Que ese enano con alas es un cabrón lo sabemos todos, así que gracias por haber hecho lo que muchos deseábamos. :p
Ahora en serio, buen post.
(Y, si me permites la sugerencia, con otros colores y otro tipo de letra, tal vez que no fuera en negrita, sería mucho más sencillo de leer.)
Buenos días Señorita Rock¨N Roll.
Se agradece tu comentario y prometo tratar de hacer la lectura más facil, echaré un ojo al tema colores y letras.
Por cierto, me he dado un buen paseo por tu blog y me ha gustado mucho, además veo que compartimos el miedo a volar y la idea de que si todos nos echásemos un cable o le dedicásemos al menos unos segundos a ayudar a los demás, todo sería más sencillo.
Un placer leerte.
Espero que sigas "bailando" muchos años.
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